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Los aretes son una excelente manera de complementar tu estilo y añadir un toque de brillo. Sin embargo, con tantos estilos, formas y tamaños disponibles, puede ser difícil encontrar el par adecuado que complemente la forma de tu rostro. Elegir los aretes correctos puede resaltar tus rasgos naturales, destacar tus mejores cualidades y crear una apariencia armoniosa. En este artículo, te guiaremos sobre cómo elegir aretes según la forma de tu cara.
Identifica la forma de tu rostro
El primer paso para elegir los aretes adecuados es identificar la forma de tu rostro. Las formas más comunes son: ovalada, redonda, cuadrada, en forma de corazón, de diamante y alargada. Para determinar tu forma, recoge tu cabello hacia atrás y mide la parte más ancha de tu frente, pómulos y mandíbula.
- Un rostro ovalado tiene la línea del cabello ligeramente redondeada, una barbilla estrecha y proporciones equilibradas.
- Un rostro redondo presenta una línea del cabello redondeada, mejillas llenas y una barbilla suave y curvada.
- Un rostro cuadrado se caracteriza por una frente ancha, mandíbula angular y barbilla cuadrada.
- Un rostro en forma de corazón tiene la frente y los pómulos anchos, con una barbilla estrecha.
- Un rostro en forma de diamante posee una frente y barbilla más estrechas, y pómulos más anchos.
- Un rostro alargado es largo y estrecho, con la frente, los pómulos y la mandíbula de ancho similar.
Elegir aretes según la forma del rostro
Rostro Ovalado
La forma ovalada se considera la más versátil y se adapta a casi cualquier tipo de arete. Si tienes un rostro ovalado, elige aretes que complementen tu estilo personal y el atuendo que lleves.
Rostro Redondo
Para los rostros redondos, lo ideal es usar aretes que alarguen visualmente el rostro. Los aretes largos o colgantes son excelentes opciones. Evita los aretes redondos o aros, ya que pueden acentuar la redondez de tu cara.
Rostro Cuadrado
Para suavizar los ángulos de un rostro cuadrado, opta por aretes redondos o en forma de aro. Estos añaden un toque más suave a la mandíbula marcada. Evita los aretes angulares o con formas cuadradas, ya que pueden resaltar aún más los ángulos del rostro.
Rostro en Forma de Corazón
Si tu rostro es en forma de corazón, busca aretes que equilibren tus rasgos. Los aretes en forma de lágrima o tipo candelabro, que son más anchos en la parte inferior, son ideales. Estos estilos ayudan a compensar una frente ancha y una barbilla angosta. Evita aretes demasiado largos o pesados, ya que podrían hacer que la barbilla se vea más afilada.
Rostro en Forma de Diamante
Los rostros con forma de diamante tienen la frente y la barbilla más estrechas, y los pómulos más anchos. Para lograr equilibrio, elige aretes más anchos en la parte inferior, como los tipo candelabro o en forma de lágrima. Evita aretes muy largos o delgados, ya que pueden acentuar la estrechez de la frente y la barbilla.
Rostro Alargado
Para un rostro alargado, elige aretes que aporten volumen y anchura al rostro. Los aros grandes o aretes con mucho cuerpo ayudan a equilibrar las proporciones. Evita los aretes largos y delgados, ya que alargan aún más el rostro.
Conclusión
Elegir los aretes adecuados puede complementar la forma de tu rostro y realzar tus rasgos naturales. Es importante conocer tu forma facial para seleccionar aretes que equilibren y armonicen tus líneas faciales. Ya sea que prefieras aretes tipo botón, aros, candelabros o en forma de lágrima, recuerda que los aretes correctos pueden elevar cualquier atuendo y hacerte sentir segura y con estilo.